jueves, 8 de abril de 2010

Never give up

La verdad es que llevo una temporada ya muy larga en la que no consigo rendir. No avanzo, no puedo. Y lo intento, no es por falta de ganas. Pero cuando no ha sido por una cosa, ha sido por otra. Y, aunque no he estado desanimada en ningún momento, anteayer, así, sin más, cambió mi estado de ánimo.

No pasó nada en especial. No me fue bien la mañana de estudio. Y la tarde tampoco, porque me había quedado chafada por la mañana (la pescadilla que se muerde la cola: no me cunde, así que me desanimo... así que aún me cunde menos y aún me desanimo más...) De manera que por la tarde, me fue peor. Y ayer ya fue completamente desastroso.

Cuando estoy así, la verdad es que no soy capaz de expresarlo. No soy capaz de hablarlo con mi preparador, ni mi novio ni con nadie. Y no por falta de disponibilidad por parte de todos ellos. Al contrario. Soy yo quien, literalmente, se aisla, no cuento nada, no digo nada. Incluso dejo de ir a cantar. Y no porque piense que el preparador me va a echar una bronca. Al contrario. Si fuese en esas circunstancias a hablar con él sólo me tranquilizaría y me haría sentir mejor. Pero soy tan idiota que no voy. Siento que, si expreso mi agobio, si transmito a los demás mi preocupación por el hecho de que desde hace meses las cosas no van como deben, entonces la ansiedad aumentará todavía más. Y, aunque no siempre sea así, aunque a menudo el hablar las cosas sea para bien, eso es lo que siento cuando estoy verdaderamente agobiada. Por alguna extraña razón, me hago creer a mí misma que, si no lo cuento, desaparecerá. Al decir "estoy mal", parece que todo cobra una mayor entidad. Se vuelve más real. Y, aunque todos los que me tienen cerca y me conocen pueden intuir en mayor o menor medida que estoy pasándolo mal, consigo hacerme creer a mí misma, que es algo que sólo sé yo. Y que conseguiré solucionarlo antes de que nadie lo perciba. Es absurdo, lo sé. Es un mecanismo de evitación, de negación, supongo. Algo así como, "si no lo ve nadie, consigo que no sea real." No es por ocultarlo ni por mentir, sino simplemente para evitar agobiarme, supongo.

Anoche, sin embargo, ya no podía más. Me había pasado gran parte del día sin estudiar, pero también sin ganas de hacer ninguna otra cosa. Mi novio me propuso salir a dar una vuelta, ir al cine, ver una película en casa. Se sentó conmigo e intentó hablar, pero yo no tenía ganas de nada. Terminamos de cenar y me metí en internet a pasar el rato. No suelo "encerrarme" así en mí misma. Por lo menos, no tanto. Pero así es como estaban las cosas. 

Finalmente, ya a la hora de dormir, se lo dije: "no quiero hablar largo y tendido del tema, pero estoy mal. No consigo rendir." Al decirlo, la ansiedad aumentó. Me encontré, de pronto, diciendo en voz alta lo que durante los últimos días (más bien la última temporada) me había estado evitando decir a mí misma, pero estaba ahí, y pesaba como una losa: durante estos meses no me ha faltado la motivación, ni las ganas ni la ilusión. Pero a lo mejor he llegado al final del camino porque, aun con todo eso, no he sido capaz de recuperar el ritmo. A lo mejor es que ya no puedo más, que ya estoy quemada y, por mucho que lo intente, no voy a poder avanzar.

Entonces, mi novio me dijo lo que siempre me dice, pero que es totalmente cierto: lo tengo todo a mi favor. Es verdad: me podía haber cundido más durante todos estos años. Hay mil cosas que podría haber hecho mejor. Y (¿por qué no?) también podría haber tenido más suerte. Sin embargo, tengo muchísimas cosas a mi favor, el apoyo de todos los que me rodean, la posibilidad material de seguir adelante y, encima, una convocatoria capaz de resucitar a un muerto.


No voy a decir que sus palabras, de pronto, me hicieran ver la luz y me reanimasen milagrosamente, porque no es así. De hecho, llegó un momento en que respondí bruscamente y le corté, porque no quería seguir hablando del tema. Ya habíamos dicho los dos más de lo que yo quería oir y más de lo que quería escuchar también. 

Sin embargo, sí que me ayudó a pensar durante las horas siguientes y a darme cuenta, una vez más, de que no puedo abandonar. Ahora mismo, por lo menos, no puedo hacerlo.

Ahora, pensando en todo lo que me dijo, me doy cuenta de que tiene razón: no hay nada que quiera hacer tanto como esto. No estoy opositando en búsqueda de seguridad y de un trabajo cualquiera. No oposito "para ser funcionaria". Es verdad, lo del sueldo seguro para toda la vida es un punto a favor, pero si estuviese aquí sólo por eso renunciaría YA. Lo que yo quiero es ser juez o fiscal. Es por eso que estoy aquí. Es verdad que en este tiempo podría haber llegado más lejos, pero he pasado por muchas cosas y me ha costado mucho llegar hasta aquí. Y no me puedo rendir ahora.

Es verdad, lo tengo todo a mi favor. Y ahora mismo es momento de luchar, no de rendirse. Creo que nunca me he rendido en nada que verdaderamente me importase. Eso no significa que lo haya conseguido todo, ni mucho menos. Pero cuando no lo he conseguido no ha sido por falta de intentos. Y tengo que intentar sacar fuerzas de donde sea para luchar por otro intento más. No puedo dejar pasar la oportunidad mientras piense que tal vez me quedan fuerzas para alcanzar mi objetivo y me quede ilusión por alcanzarlo. 

Evidentemente, tampoco hay que darse coscorrones contra la pared. No se trata de seguir, simplemente por no bajarse del burro, por no renunciar, cuando es evidente que ya no hay probabilidades de éxito. Y si llego al convencimiento de que no tiene sentido seguir, lo dejaré. Pero por ahora sí tiene sentido, o yo lo siento así.

Tengo razones de sobra para estar motivada. Los cambios en la oposición son como para aferrarse a un clavo ardiendo. Pero, además, mi vida "extra-opositoril" en los últimos días me ha dado muchas alegrías y motivos para seguir adelante y dar otro empujón. Puede que el empujón definitivo (que no el último, porque ya sabéis que esto es laaaargo).

Así que a ver si puedo con ello. TENGO QUE PODER. 

Pese al momento de duda, sigo adelante.


15 comentarios:

Jaspe dijo...

¡Hola Pichús!

Nunca me había parado a pensarlo, pero al leerte me he dado cuenta de que yo también tiendo a ocultar mis errores/decepciones de la oposición...siempre pienso que lo solucionaré al día siguiente y que en ese caso no habría mereceido la pena decirlo en voz alta...pero no siempre es así, y acabo sintiéndome sola, sin estarlo en absoluto...

Puede que esto sea un bajón primaveral...muchos meses estudiando, de los que seguramente habrías esperado más (por experiencia lo digo ;-)), el test acechando...La clave está en dos cosas que has mencionado y que son el auténtico salvavidas para l@s que llevamos tanto en esto: La ilusión y que esto sigue siendo lo que quieres hacer. Aguanta el tirón, saldrás reforzada y con muchas ganas de pelear, ¡MUCHÍSIMO ÁNIMO!

Luisa dijo...

uyyyy!!! cariñettt, qué susto me he pegado a leer esta entrada...

A ver, creo que aunque digas que no te pasaba nada, que estabas bien, con ilusión, etc...creo que no es así. En realidad había algo ahí, un pequeño malestar, quizás por el tiempo, o por cosas qe han ocurrido en el pasado y que has puesto por aquí (no tener mucha suerte, etc)...quizás no te dabas cuenta, pero ese malestar existía y seguramente has dejado que crezca por pensar que en realidad no te pasaba nada...ç

A mí a veces me ha pasado, no sólo durante la opo, sino en mi vida en general; de repente un día "te caes" y no entiendes qué ha pasado, pero cuando se pasa el gran bajón (porq tú ayer ya tuviste el grande, el de exteriorizarlo) te das cuenta de que fuiste perdiéndote señales, de que hubo cosas que se te quedaron ahí, y que al final salieron.

Tú eres una persona positiva, pero la oposición es dura y en algún momento te tiene que pesar un poco, y seguramente todo lo del año pasado o la convocatoria de este año, te dejaron más tocada de lo que creias y al final salió. Por eso no rendías, porque había ahí algo "pinchándote".

Es la parte a la que yo llamo la "enana cabrona", jajja, la que te manda mensajes negativos, la que te dice que no podrás.

Pero sabes que??? que ya lo has soltado, que ya se acabó, que es normal tener miedos, o angustiarse, es normal venirse abajo incluso aunque no hay una razón grande. Y cuando uno se desahoga y lo dice, te quedas nuevo, vences a esa enana cabrona molesta porque empiezas a argumentar de verdad, porque la gente te da motivos que en ese momento no encontrabas...

Yo te digo por mi parte que eres una persona maravillosa, y que no es que lo tengas a tu favor, es que LO TIENES!!! está ahí...y tranquila qué te queda tiempo para cambiar las cosas, para empezar de nuevo, para tirar del carro. No te presiones si no es el primer día, pero te aseguro que en un tiempo record estarás delante de las mesa hecha una campeona!!! Te lo aseguro!!!!

Un beso!!!

Pichús dijo...

Hola Jaspe, cómo vas tú?
Muchas gracias por tu comentario y por los ánimos :) Al escribir la entrada recordaba lo que me dijiste al empezar a escribir el blog: que me iba a traer cosas buenas, por el solo hecho de poder escribir y por todo lo que me aportaría la gente que participase en él. Y las dos cosas son verdad. Gracias!! :))
Lo de callarse las cosas yo estoy convencida de que es en cierta medida un autoengaño. Un autoengaño piadoso, pero engaño a fin de cuentas. Es verdad que esperamos que las cosas se resolverán (o las resolveremos) antes de que llegue la sangre al rio. Pero en realidad es un error y lo sabemos por experiencia y, aun así, reincidimos, cuando probablemente lo que mas nos ayudaría a salir del hoyo es soltar lo que llevamos dentro y, encima, recibir un punto de vista objetivo que nos ayude a ver con claridad. Y yo creo que, si no lo hacemos, (al menos en mi caso) es por lo que dice Luisa: porque preferimos no mirar. Vamos, que es un mecanismo de defensa, de negación: yo, por lo menos, me hago creer a mi misma que no hay problema o que no es tan grave, como si así fuera a desaparecer.
Madre mía, lo que estoy diciendo de mi misma suen tan neurótico que me da miedo!! :D
Tienes toda la razón: hay que aguantar de pie, sea como sea, y así salir reforzada. De estos baches, una vez pasados, siempre se sale con energía renovada. Sobre todo, cuando el esfuerzo da su fruto. Y, si Dios quiere, lo dará en el test (ESO ESPERO!!!)
un beso grande, Jaspe, mucho animo para ti también, recuerda que tenemos que ser compis de promoción! :)

Pichús dijo...

Luisa, guapísima, gracias de verdad!! :)
La verdad es que tienes toda la razón en lo que dices. No estaba en plena forma, yo se que es así. Y en realidad sabia que me pasaría al volver a estudiar después del suspenso (retirada) en el ultimo examen.
Es como un efecto rebote o algo así: el año pasado fue muy complicado para mi por el tema del hombro. Ayer me acordaba de que mi padre me decía que le parecía alucinante que después de tantos meses casi de paron absoluto encontrandome mal y todo eso, no hubiera decidido cogerme unas vacaciones y volver a la siguiente. Y ayer pensaba que, probablemente, todo el cansancio psicologico acumulado durante tantísimo tiempo, el desanimo que hubiera sido normal entonces ha salido mas tarde. Aguanté el tirón y gracias a eso, he podido mantener la ilusión y, pese al suspenso, no pensé en abandonar en ningún momento. Pero supongo que estaba cansada... Y, si a eso le sumas las cosas que van surgiendo... Pues resulta que al final explotas.
En lo que espero que tengas razón es en lo de que a partir de ahora, al haberlo "soltado" todo, las cosas empezaran a ir de otra manera. Hablar, escribir... Sincerarse a veces resulta terapéutico. Ojalá para mi también lo sea! :) Mil gracias por leerme, a ti, a Jaspe y a todos. Y gracias porque tu si que eres una persona muy especial. Y, la verdad, aunque nos hayamos visto tan poquito, con todo lo que nos hemos escrito ya te tengo muchísimo cariño.
Como estas tu? Hablaste con el preparador? Espero que si, que te fuese bien y que vayas q descansar este fin de semana. Como vas de ánimos? Espero que todo siga viento en popa.
Otra vez gracias, Luisa. Eres un encanto. Un beso grande!

Pichús dijo...

Por cierto, se me olvidaban un par de cosillas...

JAspe: tienes toda la razón en una cosa, y es que las claves para poder seguir adelante son la ilusión (pese a todo, la tengo), por lo que supondrá para mi aprobar (ojalááá!!!) después de tanto tiempo, por conseguir el objetivo, por el cambio de vida y por todo... Y por la convicción de que ahora mismo no hay ninguna otra cosa que querría hacer: lo que quiero es conseguir esto!!

Luisa: ME HE PARTIDO DE RISA con lo de la enana cabrona... :D :D La he visualizado y todo... Me acordaré de ella cuando intente jugarme alguna mala pasada :)

besos a las dos otra vez!

Introspección dijo...

Pichús, permítete también un bajón pero tómalo como lo que es y punto, pasa página y... A POR TODAS OTRA VEZ!!!.
La primavera... ¡qué es muy mala, según como!.
¡Un abrazo y muchos ánimos!!!

PUCELANO dijo...

Pichús, ya tocaste fondo, sacaste todo eso que te estaba haciendo daño, y ahora sólo te queda continuar con ilusión y esperanza renovadas. Es cierto, a veces evadimos comentar nuestr@s fracasos...es un mecanismo de autoengaño. Sí te quiero hacer una sugerencia: cambia tu definición de fracaso. ¿Para tí qué es fracaso? Si defines el fracaso como dejar de ser tú, dejarte caer, perder tu esencia, perder las ganas de luchar...entonces nunca fracasarás. Porque está en tu mano siempre levantarte y seguir luchando. El resto de acontencimientos no deseados no son fracasos, son simples resultados...que puedes cambiar en el futuro;-)¿Qué te parece?

Pero, aunque hablarlo muchas veces libera, tampoco es bueno que sigas dándole vueltas. Una vez que lo echaste fuera centra tu atención en levantarte, sacudirte el polvo y continuar.

Un beso fuerte!!

Unknown dijo...

la oposición tomatela con calma,lo de rendir y no rendir es relativo.Todo opositor medinamente listo siempre va a pensar que tenía que estudira más y demás pero las cosas vienen como vienen.Este año he estudiado comio una bestia,intentando llegar a todos los puntos,me metí un panzón para secres,me tocó un tema de mierda que ellos ni se lo saben y me tuve que levantar con el soniquete encima que ellos me decían que con el nivel demostrado hasta entonces estaba casí aprobado.Me pongo jueces y me toca genocidio que erar de los pocos que no pdía ni iventarmeklo pero bueno aquí sigo,estoy en disposición de aprobar y tu probablemte estés igual.Lo que no voy hacwer es fustigarme porque ahora sea incapaz de ponerme como mínimo 12 horas

Anónimo dijo...

Hola Pichus

A mi me pasa un poco lo mismo, pero te ha pasado a ti, acabo diciendo las cosas casi sin proponermelo.

La convocatoria de este año esta bien para los que llevamos cierto tiempo, tenemos que intentarlo con todas nuestras fuerzas.

Animo

Pichús dijo...

Introspección, Pucelano, Carteles, Quieroserjuez... ¡Gracias a todos! :)

Tienes razón, Introspección, en que a veces tenemos que permitirnos tener un bajón, tomándolo como lo que es y ya... ¡lo que pasa es que el tiempo apremia...! Pero bueno, no hay que agobiarse.

Pucelano, estoy totalmente de acuerdo contigo, es bueno sacar lo que llevamos dentro, libera; pero tampoco es bueno regodearse y darle vueltas. Gracias por tu definición de fracaso :)

Carteles, tienes razón, la verdad es que siempre parece que podíamos haber estudiado más. Para mí, de verdad, nunca es suficiente. Creo que pocas veces me preguntan "qué tal te ha ido el estudio" y yo contesto "estupendamente". Siempre puede cundir más. Pero, de verdad, estos meses yo no he avanzado :)

Quieroserjuez, en cualquier caso, la conclusión a todo esto es la que tú dices, y lo que han dicho también algunos compañeros, que tenemos que seguir intenándolo con todas nuestras fuerzas, y ahora con energías renovadas.

¡Gracias otra vez y un beso a todos!

Unknown dijo...

Es normal que ahora no estés a tope.haz lo que puedas y verás como de aquí a un tiempo empiezas ameterle bastante caña.
Miembros de tribuanles están diciendo a la gente que se pongan a estudiar que este año está francamente bien para ganar la plaza

Pichús dijo...

Muchísimas gracias por los ánimos, Carteles :) ¡Un beso!

Pichús dijo...

Muchísimas gracias por los ánimos, Carteles :) ¡Un beso!

Mery dijo...

Lo primero es admitir el problema, lo segundo es dejar de verbalizarlo, porque cada vez que decimos "estoy de bajón" o "he tocado fondo" etc, nos volvemos a acomodar en el pozo. De eso nada, hay que subir, hay que salir de él, así que sácalo todo a fuera y a partir de ahí una sonrisa, aunque sea forzada. Al final saldrá sola y todo tendrá mejor color.
Un besazo

Pichús dijo...

¡Tienes toda la razón del mundo, Mery! ¿Cómo estás tú? Espero que recuperando todo tu brío!! :)
¡Un beso muy fuerte! ¡Y mucho ánimo!

Quién escribe

Mi foto
Pichús
Durante los últimos años, OPOSITORA A JUDICATURAS (¡ojalá que por poco tiempo!). Pero en los ratos libres intento seguir siendo YO.
Ver todo mi perfil

"Sigue aunque todos esperen que abandones. No dejes que se oxide el hierro que hay en ti. Haz que en vez de lástima, te tengan respeto. Cuando por los años no puedas correr, trota. Cuando no puedas trotar, camina. Cuando no puedas caminar, usa el baston. ¡Pero nunca te detengas!" (Teresa de Calcuta)


"A la larga el éxito es más fácil que el fracaso. Sencillamente, consiste en saber lo que se quiere, en saber hacerlo y en tener la persistencia y la determinación de lograrlo" (B. Bailey)


"Si puedes soñarlo, puedes hacerlo" (Walt Disney)


"Si piensas que puedes, tienes razón y si piensas que no puedes, también tienes razón."


"El futuro pertenece a quienes creen en la belleza de sus sueños" (Eleanor Roosvelt)


"El mayor peligro para la mayoría de nosotros no es que apuntemos demasiado alto y no demos en el blanco, sino que apuntemos demasiado bajo y acertemos" (Miguel Ángel)


"No podemos descubrir nuevos océanos a menos que tengamos el coraje suficiente para perder de vista la costa" (Anónimo)


"Los muros existen por alguna razón. Y no es para mantenernos fuera, sino para darnos la oportunidad de demostrar hasta qué punto queremos algo. Y para frenar a quienes no lo desean suficientemente." (Randy Pausch)

¿Alguien me lee?

Quiénes vienen por aquí