sábado, 3 de julio de 2010

Una gotita de agua en la mar

Disposición 4185 del BOE núm. 63 de 2010 ¡Hola a todos!  

Me llamo Sara. He estado 9 años opositando hasta que, finalmente, he conseguido, hace unas semanas, aprobar todas las pruebas selectivas de acceso a las Carreras Judicial y Fiscal.

Pichús me ha sugerido que, si me apetecía, escribiese unas palabritas para su blog... ¡Y aquí están!

No sé si podría haber apretado más el estudio en estos años, pero de lo que no tengo duda es de que no renunciaría a haber vivido menos. Y, desde luego, no me arrepiento de las experiencias que he ido viviendo y que me han hecho ser la persona que soy hoy.


Entre todas esas experiencias que os decía, hay que incluir que, cuando llevaba seis años y pico, tras haber llegado al último ejercicio, decidí dejar las oposiciones, pues consideré que mi destino estaba en otro lugar y que mis facultades opositoras ya no se desenvolvían con la misma plenitud. En cinco semanas, y tras echar muchísimos currículum, conseguí un empleo en otra ciudad.
Y allá que me fui... Conocer a gente nueva, a personas que siquiera habían tenido opción de luchar por sus sueños, me hizo sentirme responsable de mi situación y fraguar un plan. No estaba dispuesta a que con un sueldo compraran mi tiempo (8 horas diarias) haciendo algo que, realmente, no era mi ilusión en la vida. Así, en menos de un año,  y a la par que trabajaba, volví a presentarme al test. Y, como lo superé, decidí volver, apretar los dientes un par de años y, finalmente, conseguir lo que he conseguido.

Me gustaría transmitiros mis sensaciones. Qué ha supuesto opositar para mí, después de mi último paso por el Supremo, hace muy poco, (donde conseguí aprobar el último examen, el tercero, con ejecuciones hipotecarias y uno de los temas de Marítimo incluídos en el lote...) ¡Quién me hubiera dicho a mí hace un tiempo que sería capaz de sobreponerme a unos temas como estos y a aprobar!

Empecemos por el principio...


EL AUTOSABOTAJE
Cuando se nos echan los años encima, cuando sin entender muy bien por qué se nos atraganta el test, o el oral, y no acabamos de dar con la tecla... es cuando nos toca sufrir y buscar soluciones


-       Que nunca os tiemble el pulso si tenéis que cambiaros a otro preparador que sí os escuche dar los temas (en vez de adelantar trabajo), o se preocupe por vuestro estado anímico, o sea preciso y no os deje pasar una...
-       Que no os tiemble el pulso si os agobia estudiar en el mismo cuarto de siempre. Buscad vuestro espacio en bibliotecas, en otras habitaciones... Yo durante una época me llegué a bajar a diario 3 o 4 horas a un parque cercano a mi casa con los temarios recién impresos para subrayar "como si fuesen temas nuevos." Conseguí en un mes avanzar lo que hubiera tardado casi tres.
-       Que no os tiemble el pulso si necesitáis explicar a vuestra familia que de verdad deseáis seguir estudiando, o a vuestro novio o novia que vosotros no sois un ser escindido del opositor que tiene ante sus ojos. Explicadles que ese opositor es vuestra esencia, pues las emociones e ilusiones son nuestra esencia (al fin y al cabo al opositar nos dejamos llevar por nuestro corazón!)  y que si no ama al que oposita... mejor que cada uno marche por su lado.

Todo esto es una maravilla, es luchar, es vivir... ¡y no es autosabotaje!

-       Autosabotaje es decirse a uno mismo por las mañanas "nunca lo voy a lograr." ¿Y tú qué sabes? ¿No estás estudiando acaso?
-       Autosabotaje es no disfrutar de los momentos de descanso porque dejaste un tema a medio estudiar. La próxima vez estudia más concentrado, que el estudio es sagrado pero chafar el ocio por el estudio es tan imperdonable como lo contrario.  
-       Autosabotaje es verte repentinamente en un espejo y verte feo, desmejorado, perdedor... ¡Hazme el favor de salir de la burbuja y dejar de fustigarte! Si te pasas la vida encerrado es normal tener mala cara. No eres ningún perdedor, lo que eres es un gladiador, un luchador. Y, como ellos, tienes en tu piel la marca de las espadas (en este caso, de las horas de estudio,  desvelos, madrugones, nervios...).

No seas tu propio enemigo, nadie mejor que tú se conoce y nadie mejor que tú sabe dónde hacerte daño, ahí donde duele. Cuando estos pensamientos hagan mella, llama a ese amigo, familiar (o psicólogo si lo precisas), llama, grita, pero no te quedes callado. Muévete. Actúa. No al autosabotaje.


Una vez tenemos identificado y acorralado al autosabotaje y que nos hemos comprometido a cambiar lo que no nos funciona en las opos... lo siguiente es:


LAS MOTIVACIONES: ¿Por qué decidiste opositar?
¿Tal vez viste en la televisión alguna operación antidroga importante?
¿Eras fan de Ally Mac Beal?
¿Adorabas la serie “Juzgado de Guardia”?
¿Deseabas trabajar en "algo importante"?
¿En tu familia sois todos juristas?
¿Disfrutabas cuando en las películas made in USA el fiscal se dirige al jurado y suelta la parrafada…?

Es bueno recordarse a uno mismo por qué decidió meterse en esta lucha opositora. Al fin y al cabo, opositar puede ser una gran epopeya. Si piensas en “El Señor de los Anillos” me entenderás seguro:
El opositor es Frodo, el temario es el anillo, que le va consumiendo la energía... y Sauron es el miedo interior que tenemos al fracaso. Hasta que un día conseguimos llegar al Monte del Destino, defender el último examen y aprobar. ¡Y se acabó todo! Se acabó. Existe el final.

Disculpad, centro el tema: Como decía, es bueno recordarnos a nosotros mismos qué fue lo que nos llevó a estudiar, por qué seguimos en ello. Hemos de sentirnos Jueces-Fiscales-Secretarios y dar a conocer a los demás nuestra motivación.

Perdámosle el miedo a decir en alta voz a nuestros seres queridos: "esta vez voy mejor preparada que nunca al test" o "creo que en el oral próximo voy a conseguir llevarlo casi todo y voy a dar la impresión al Tribunal de que soy, de que me siento, fiscal, y me van a tener que aprobar".
Cambiemos la rutina de decir "voy fatal" "no me acuerdo de nada". Pensar en negativo se acaba materializando, y tus motivaciones no son "no aprobar en la vida", ¿verdad?

Coge el timón y pon rumbo a tus motivaciones.
 


Piensa que vas a estar justo donde quieres y que no te tiemble el pulso... (si te tiembla, es que te estás autosaboteando, así que léete el párrafo de antes, Ok?)  Ahora, vuelves a intentar manejar el timón por ti mismo. Nadie dijo que no cueste, que no haya que llorar, que no haya que estudiar muchísimo... Pero es que es lo que has elegido, son tus motivaciones.
¡¡¡Nunca pierdas de vista a tus motivaciones!!!

Y finalmente, tras superar los autosabotajes y fijar tu estación de llegada en el punto en que están tus motivaciones, llega el último paso:



TU DESTINO
El Destino (si eres creyente, la Providencia), consiste (explicado en plan "mis propias palabras") en creer que una Fuerza/Ente/Ser externo ajeno a nosotros puede tener poder decisorio en nuestros éxitos y fracasos...
Si no crees en él o en ella, no hace falta que leas esto último, porque si no te autosaboteas y marcas firmemente el rumbo a tus motivaciones, puedes llegar a buen puerto exactamente igual. Pero si, en cambio, crees en el Destino, continúa leyendo para cerrar el círculo de este post.

El Destino puede suponer tener en último término el consuelo reparador de que, aunque nos vaya mal ahora... finalmente, algún año nos tocarán los temas precisos y aprobaremos. Pero no es ésta la acepción de Destino que creo que los opositores debemos concebir. La nuestra ha de ser una acepción dinámica, in fieri, dependiente de nuestro trabajo diario.

Destrascendentalicemos por un momento. Dejemos de pensar en aprobar la oposición: pensemos en aprobar cada examen. Luego, en cumplir a tiempo cada vuelta al temario. Finalmente, pensemos en cumplir el plan quincenal. Más aún: centrémonos exclusivamente en cumplir el plan de cada clase. ¿Realmente es tan, tan difícil ponerse serios y cumplir clase a clase?
Yo, de corazón, creo que no. Lo difícil es pensar en aprobar la oposición pero, clase a clase, la tarea es más llevadera, creo. Cada clase es una gotita de agua en la mar que construirá nuestro aprobado. ¡Cuida tus gotitas! ¡Súmalas!
 

Y, hecho eso, que el Destino juegue sus cartas. Si día a día vas intentando cumplir con la mayor honestidad, ten por seguro que, aunque tu Destino sea abandonar un día sin conseguir el aprobado final porque decidas ser feliz haciendo otra cosa, no sentirás haber perdido nada. Más bien, verás que, allá fuera, en el mundo real no opositor, el ex-opositor tiene una templanza para los problemas fuera de lo común. 
A mí me pasó cuando dejé las oposiciones definitavamente -eso decía y pensaba- y me puse a trabajar. Y, cuando surgían problemas, pensaba... "miedo se pasa en el Supremo, ¡esto no es nada!"

Puede que nuestro Destino no sea aprobar pero, indudablemente, sí que es luchar. Morir matando. Ser felices de sentirnos unos gladiadores de la vida, unos románticos empedernidos en pos de un sueño laboral. Unos William Wallace a la carga en inferioridad, unos espartanos defendiendo las Termópilas sabiendo que la derrota será cuestión de tiempo.

Nuestro Destino es elegir el camino difícil, el pedregoso... porque el camino llano lleva a un lago que no está mal... pero el pedregoso lleva a la Gloria (bueno, o eso creemos, como idea es bonita, creo).

Y la gracia es que un día hace todo "¡plas!". Y apruebas. Y se acaba todo. Y te das cuenta que la vida sigue y que no has llegado, ni mucho menos, al final. Aunque en tu vida sí que sabes que la lección de la constancia, el tesón y el no desfallecer sí que la has aprendido.




Eso sí, un último apunte: no permitas que tu vida sea la vida de otros. Si estás en esta lucha por dar el gusto a tu familia, o a tu pareja... ¡no es tu Destino! En ese caso, cuanto antes, da un golpe de timón, fija tus motivaciones ¡y... a por tu Destino real!



Ojalá mis palabras puedan servir a alguien. Son sólo mis opiniones, eso sí, matizables seguro y mejorables también!

Un gran abrazo para todos de Sara


19 comentarios:

Unknown dijo...

¡Qué honor ser la primera en comentar tu entrada magistral, Sara! Imprimiré cada una de sus letras e imágenes para impregnarme de ellas cada día que amanezca. Serán la fuerza que me mueva para darlo todo. No matizo nada, no mejoro ni añado nada en tu entrada. Ya te he dicho que tienes el don de decir aquello que cada uno necesita oir en cada momento. Sólo una cosa: ¡gracias!, quizás no seas consciente de hasta qué punto nos ayudas, en mi caso, mucho.

Mi mundo de opositora dijo...

Yo también reitero ese gracias por tu entrada y Felicidades ¡¡¡

Estoy en ese momento de sacudirme el polvo y empezar de nuevo ...cuesta, pero lo voy a hacer xq ésto es mi sueño y no concibo una vida en la q no tenga q levantarme x las mañanas xra ir al juzgado.

Un besazo y estoy segura q ahora la justicia será un poquito más justa contigo ahí.

Jaspe dijo...

¡Ole, Sara! Muchas gracias por la entrada y enhorabuena por tu aprobado, ¡que disfrutes al máximo de ese momento taaaan dulce!

Pichús dijo...

Sara, guapetona, ¡GRACIAS! Ya te las había dado, pero te las vuelvo a dar por aquí :) Te pedí que escribieses esta entrada porque pensaba que tu experiencia podría animar a todos los que la leyesen, pero la primera beneficiada fui yo, que encontré un estímulo en tus palabras durante los días anteriores al examen y ahora las sigo teniendo muy presentes.

Iba a esperar un par de días antes de publicarla, para que todo el mundo hubiese vuelto ya de vacaciones post-test y a nadie le pasase desapercibida, pero visto lo mal que ha ido el examen y lo desanimados que están tantos compañeros pensé que mejor publicarla ahora, que podía venir bien a más de uno recibir ánimos de alguien como tú, que ha pasado por tantos batacazos hasta llegar al final.

¡Enhorabuena por todo lo que has demostrado! Disfruta del éxito que tanto esfuerzo te ha costado conseguir y sé muy feliz en esta nueva etapa. Ya nos irás contando, pero seguro que todo irá genial.

¡Un beso grande y GRACIAS otra vez!

Anónimo dijo...

Qué grandes tus palabras Sara!! Enhorabuena por tu aprobado!! Y sobre todo muchas gracias por tus reflexiones. Nos aportan luz en el camino!!!Me ha encantado leerte.
Un fuerte abrazo,

Ruth

Unknown dijo...

Felicidades sara por tu aprobado.Creo que hay que seguir hasta que la suerte sopla a tu favotr y te metes dentro uanque por el camino haya baches o cambios de dirección.Espero que ya que este ñao en jkueces no va ser el muio si lo sea la siguiente convocatoria.
PD:yo pondría otro consejo que a no todo el mundo le afecta pero que ami sí y que me ha hecho no ser del todo eficaz en el oral.La oposición es un exámenm comop otro cualquiera,es el tribunal el que te examina nbo uno.Y aunque no llegues a su nivel igual si que tienes el nivel mínimo para aprobar.En la carrera no llendo de listo,se aprenden als cosas poco a poco.

Mery dijo...

Sara, aprovecho esta entrada para darte de nuevo la enhorabuena. Me alegro muchísimo los aprobados, pero el de los veteranos me emociona mucho más porque habéis conseguido vencer el peor enemigo del opositor: el desaliento. Mi más sincera enhorabuena y gracias por dedicarnos estas palabras.

Pichús dijo...

Por cierto, se me olvidó decírtelo... Me encanta la parte de El Señor de los anillos :) Y me gusa lo de que Sauron es el miedo interior. Eso es bueno. Nuestro mayor enemigo es nuestro propio miedo, nosotros mismos. ¡Qué gran verdad! ¡Besos!

Sara dijo...

Muchísimas gracias a todos, me alegra que os haya servido leer mi visión de las oposiciones!
Y bueno, ya sabéis de la Ley del Karma... la bondad que se reparte se recibe y si me deseáis lo mejor en esta nueva etapa sabed que vuestra bondad os será devuelta y encontraréis vuestro premio!
Gracias a todos!
Pichus, te ha quedado perfecto el post, las fotos, todo...yo no lo hubiera editado tan bien!
Maite, para mí también ha sido un honor que seas la primera en comentar! ya verás como este año la paz que tienes últimamente te va a hacer comerte los libros!
Mi mundo de opositora, más justa no sé, pero desde luego cuidadosa al máximo sí que prentendo ser y hacerlo lo mejor que pueda! gracias!!! muy chulo tu blog!
Jaspe que estos mesecitos de estudios que tienes por delante sean como tu avatar...un arcoiris de ilusión, alegría y productividad! you can, I know it!
Ruth, me alegra de que hayas visto un rayito de luz en mis palabras, de verdad que lo que he intentado es ayudar y sobre todo "sacudir" consciencias y hacer que el que lea se pregunte si de verdad podría da rmás y qué podría hacer...
Carteles 17, gran verdad la que dices. Yo a mis compis de prepa que empiezan les digo siempre: esos señores que te examinan no te conocen, ellos no saben quién eres, si eres bueno memorizando artículos o desarrollando, o... vende tu producto al Tribunal, fuera vergüenzas, si no les gusta te echarán pero tú intenta "vender tu moto...". Mucha suerte!!!
Mery muchas gracias me felicitaste por el foro, por aquí...un honor! y espero que si entro en la Escuela Judicial podamos encontrar un hueco para conocernos, no? que a tan ilustre bloguera como tú pues hay que conocerla en carne y hueso!
Pichus, de nuevo, mil gracias por la oportunidad que me has brindado desde tu blog, un espacio consolidado y visitado, para que mis sensaciones sobre las opos lleguen a cuantos más mejor...
Gracias a todos!!!

Anónimo dijo...

Sara, yo no me tiré 6 años estudiando como tú. Fueron 2 y medio. Y lo dejé. Me embarqué en otras oposiciones, las aprobé en menos de 1 año, y.. a trabajar. Han pasado 12 años desde entonces. Tengo 39 años. En esos 12 años he sacado 3 oposiciones más (todas de Grupo A). Tengo un sueldo que supera los 3.500 limpios, he sacado la tesis doctoral, he publicado más de una veintena de artículos, cuatro libros, he dado más de una quincena de ponencias, he ganado un premio jurídico de artículos doctrinales a nivel nacional... O sea, que estos 12 años no se dieron mal. Pero, sigo con las ganas de sentarme en un despacho como juez, y no como funcionario en un alto departamento de una Administración autonómica...

Claro, no es cuestión de autosabotearse, o sí, el tema es que para ser juez tendría que renunciar a todos estos 12 años (que tampoco me llenan al 100%), pedirme una excedencia, dejar de hacer curriculum (si es que sirve para algo), y estar 2, 3 ó más años en el LIMBO, sin producir nada y sólo memorizando códigos... La familia, la pareja, además es otro problema añadido, pues es difícil entender dejar el trabajo, dejar de traer un sueldo e intentar vivir unos cuantos años de lo ahorrado y sólo estudiando...

¿Qué te parece todo esto? ¿Es para intentarlo? Gracias por tus palabras y tu maravilloso ejemplo, y enhorabuena, campeona

Anónimo dijo...

Sara, yo no me tiré 6 años estudiando como tú. Fueron 2 y medio. Y lo dejé. Me embarqué en otras oposiciones, las aprobé en menos de 1 año, y.. a trabajar. Han pasado 12 años desde entonces. Tengo 39 años. En esos 12 años he sacado 3 oposiciones más (todas de Grupo A). Tengo un sueldo que supera los 3.500 limpios, he sacado la tesis doctoral, he publicado más de una veintena de artículos, cuatro libros, he dado más de una quincena de ponencias, he ganado un premio jurídico de artículos doctrinales a nivel nacional... O sea, que estos 12 años no se dieron mal. Pero, sigo con las ganas de sentarme en un despacho como juez, y no como funcionario en un alto departamento de una Administración autonómica...

Claro, no es cuestión de autosabotearse, o sí, el tema es que para ser juez tendría que renunciar a todos estos 12 años (que tampoco me llenan al 100%), pedirme una excedencia, dejar de hacer curriculum (si es que sirve para algo), y estar 2, 3 ó más años en el LIMBO, sin producir nada y sólo memorizando códigos... La familia, la pareja, además es otro problema añadido, pues es difícil entender dejar el trabajo, dejar de traer un sueldo e intentar vivir unos cuantos años de lo ahorrado y sólo estudiando...

¿Qué te parece todo esto? ¿Es para intentarlo? Gracias por tus palabras y tu maravilloso ejemplo, y enhorabuena, campeona

Sara dijo...

Estimado anónimo:

Lo primero de todo, te agradezco sinceramente que me preguntes qué me parece lo que me planteas. Verdaderamente creo que al dejar pronto la oposición a las Carreras Judicial y Fiscal no te quemaste y fuiste muy muy inteligente con esa jugada, pues te sacaste otra oposición (y otra y otra!) que te han permitido vivir bien, por lo que veo, con un buen sueldo, construyendo una familia y además, por lo que escribes, consiguiendo reconocimientos en un mundo tan ingrato y competitivo como es el mundo académico, mundo que conozco bastante bien por amistades de dentro y fuera (EEUU, Holanda) de España. Desde luego eres una persona capaz, muy capaz, y creo que intentar ser juez para tí no es quimérico, el haber tenido que echar bastantes años en esto (desgraciadamente) me ha hecho ser bastante despiadada con ciertas cosas y una de ellas es con "aconsejar a la gente alegremente a que se prepare unas oposiciones como estas": créeme que por la manera en que te expresas y por tu currículum y aún a riesgo de ser osada, creo que no te falta ningún ingrediente para intentarlo.

Partiendo de esta base, y en cualquier caso considerando lo que te he comentado, he ahora de aquilatar, sopesando tu situación: y a riesgo que ser osada de nuevo, ¿no crees que te das tú solo la respuesta respecto a si te lanzas o no a opositar?...porque yo deduzco del segundo párrafo de tu mensaje que claramente te pesan más las desventajas que las ventajas (si bien es cierto que comentas que engordar currículum tal vez no te sirva de nada como dato que te podría no pesar en caso de volver a opositar.... sabemos que en el mundo académico el problema es que siempre hay alguien mejor y/o más especialista que tú y de ahí esa sensación, pero claro que engrosar tu currículum te sirve/ servirá!). Como te decía, si lo leo de nuevo, veo que eres una persona analítica y que si bien tienes ilusiones también creo que tienes un status que te gusta y que te hace sentir bien...y sabes que a día de hoy opositar te haría retroceder, económicamente, socialmente e incluso, si la familia no te apoya, anímicamente... estoy segura de que todo esto ya lo sabes y que te puede resultar redundante leerlo, pero te quiero hacer notar que, tal vez, (sólo tal vez), tu deseo de ser juez radique en la necesidad de conseguir un nuevo reto, de saber que no te dejaste en el camino ninguna ilusión por cumplir... de ser así, permíteme que te diga que esos 12 años de los que hablas desde luego hablan de una persona muy capaz que no necesita más blasones para adornarse. Y no hablo sólo de lo académico, hablo de que has construído una familia y una vida, eso es mucho, muchísimo. En cambio, si de corazón piensas que ser juez es la gran ilusión de tu vida... pues qué te puedo decir... que pidas un par de años de excedencia a ver cómo te desenvuelves estudiando y lo intentes. Si no lo consigues eres mayor para asumir que a lo mejor no siempre se puede tener todo. Pero si lo consigues...¡ay si lo consigues! seguro que serías feliz.

En todo caso supongo que conoces de la existencia de convocatorias para trabajar como juez sustituto y, en tu caso y con tu currículum, para acceder a plazas de Magistrado especialista de lo Contencioso o de lo Social, vias ambas en las que no tendrías que ponerte a opositar como cualquier recién Licenciado.

Te agradezco enormemente tus felicitaciones y te doy mi más sincera enhorabuena por apurar tu vida como la apuras: trabajando, publicando... qué gran bendición! tantas personas dejan que el tiempo se les escurra entre las manos...
Muchísima suerte!

Pichús, señora administradora de este blog, si alguien me contesta en este post y pasan unos días y no he contestado, te ruego que me notifiques por email, vale? ¡es por si se me pasa algo! ¡muchísimas gracias y perdona el trabajo extra!.

Pep dijo...

Hola, en primero lugar ENHORABUENA Sara. Yo me considero un intruso en los blogs de la gente que estudia notarias y judicaturas, puesto que aunque yo no lo estudio me sirven de motivación y en algunos supuestos, como el post que has escrito, me transmiten felicidad (suena cursi, pero unos lloran con la roja y a otros nos hace feliz ver a la gente feliz).
Yo estudio y trabajo; y digo esto porqué necesitaba contestar a nuestro amigo "Anónimo:tesis doctoral": yo no soy nadie para dar consejos, y menos cuando no me los has pedido; yo entiendo mejor que nadie el afán de superación y el inconformismo, pero tú problema es que has estudiado mucho pero no te has parado un día a pensar que coño es lo que quieres, estaría bueno que lo decidieses pronto porque otra cosa no lo se, pero te aseguro que el tiempo es un bien escaso.
PD.- La familia no es un problema, es otra recompensa que has optenido de tu quehacer diario. Madura.

Unknown dijo...

Yo si te ves con ganas no lo dudaría y apor todas.El tio de uan amiga,era director de un banco pero siempre le había hecho ilusión notarias,se puso a ello y aprobó.La familia no te preocupes que la final serás la que más te anime en la aventura.En esto como en todo ganarás en unas cosas y perderás en otras pero la final tendrás tu recompensa
lKLevo en esto bastante y pensandolo después del último fracaso,llegue a la conclusión que hubiera hecho lo mismo,mejor pero lo mismo,la gente que desaparece es porque no merece la pena y en caulquier sitio te hacen trabajar como un negro y por poco dinero así tmapoco sería feliz

Kela dijo...

SARA OLÉ POR ESTE POST Y POR ESTE APROBADO QUE TE MERECES DE SOBRA!ahhh y muchas gracias por esas hermosas palabras del viernes que me llegaron muy dentro!UN BESAZO COMPI!

Anónimo dijo...

Puede que sea un problema de madurez, no lo niego. El desear muchas cosas a la vez, y no ser nada selectivo. Estoy de acuerdo contigo, Pep, en este sentido. Pero quizás sea un enorme defecto mío, pero también en cierto modo una virtud, pues el trabajo hecho hasta ahora, hecho queda. El tiempo es un bien escasísimo, y por supuesto que la familia es gran parte de nuestra vida. Pero siento que quiero escalar la "montaña" de la oposición, que ahora tengo fuerzas y aunque no tenga el brío de un veinteañero me sobran otros recursos para el ascenso, aunque cada vez me quede menos tiempo y ya no tenga esos benditos 20 años. Eso es el afán de superarse a uno mismo, de ganar, de conquistar algo que por distintos motivos abandoné, y que quizás pueda ser lo más grande que consiga en esta vida (con mis propia fuerza y esfuerzo).
Siento una opresión diaria en el pecho por no volver a luchar. Esa es la verdad (mi verdad).

Sara dijo...

Bueno, por si alguien no lo sabía a Doña Kela la conozco desde hace bastante. He tenido la gran fortuna de compartir batallas con ella y me quito el sombrero ante personas que, como pasa en su caso, lucharon y lo dieron todo consiguiesen o no el objetivo. Una oposición también puede ser el camino a conocer a personas que siempre van a estar ahí, a reconocer que nuestros límites van más allá de lo que creemos, a no tener miedo cuando se nos presenten situaciones difíciles... Raquelilla, ya sabes cuánto te admiro y bueno, estuvo bonito soltar una lágrima con las manos cogidas mientras te dije eso de "más valiente es el que deja de opositar cuando ya no puede que el que continúa en la inercia y malgasta su vida".
Anónimo, si lo tienes tan tan claro, lánzate. Yo en mi post intento ser lo más objetiva posible pero veo que tu ilusión puede con todo... por qué no vas a aprobar si otros lo hemos hecho? muchísimo ánimo y templanza con tu elección!!!

Pep dijo...

(a anonimo): pues entonces adelante, tú te lo dices todo. No se arrepiente el que no lo consigue, sino el que no lo intenta. Yo sólo te quería transmitir que quizás aunque apruebes no encuentras eso que estás buscando, que no se puede estar siempre rascando el cielo porque éste no tiene tope, y que hay que saber disfrutar hasta de un chicle que te comas. Yo tampoco tengo 20 (tengo 32), y mi meta es lo que tu ahora tienes (creo), soy funcionario de Ad. General; por eso en el fondo me fastidia que no valores lo que tienes como yo lo haría (no te quejas a un ciego de que tienes miopia). Diciendo lo que dices yo te animo, pero hay un dia en el que te tienes que comprar un perro, una moto, o un patienete y llevar a tu mujer y tus hijos al burguer king (y para mi ese es tu momento: sin que dejes de superarte, pero sin encerrarte X años para ganar + o -, a saber en que lugar y resolviendo el que...). Animo, hagas lo que hagas eres un ejemplo (perdona por lo de falta de madurez).

Sara dijo...

Queridos Pep y anónimo: me gusta mucho la libertad de expresión. Y me gusta ver que pese a que por escrito la comunicación es siempre mucho más compleja os habéis dicho en libertad (y muy clarito!) lo que os ha parecido. Yo creo que gente como vosotros es muy necesaria en las Carreras Judicial y Fiscal y en la Administración -hablemos de la que hablemos-. Olé por vuestro fair play y por vuestra flexibilidad de miras, y si mi post ha servido para remover conciencias, inspirar -o despertar- ilusiones que andaban agazapadas, bienvenido sea... Anónimo, te repito lo dicho, tienes mucho ya(como también te dice Pep) pero desde luego si tienes claro que te ves con fuerzas y tienes ese sueño... ¿por qué no vas a invertir tu vida en ello? yo sólo te puedo decir que lo hice y que pude así que... adelante!

Quién escribe

Mi foto
Pichús
Durante los últimos años, OPOSITORA A JUDICATURAS (¡ojalá que por poco tiempo!). Pero en los ratos libres intento seguir siendo YO.
Ver todo mi perfil

"Sigue aunque todos esperen que abandones. No dejes que se oxide el hierro que hay en ti. Haz que en vez de lástima, te tengan respeto. Cuando por los años no puedas correr, trota. Cuando no puedas trotar, camina. Cuando no puedas caminar, usa el baston. ¡Pero nunca te detengas!" (Teresa de Calcuta)


"A la larga el éxito es más fácil que el fracaso. Sencillamente, consiste en saber lo que se quiere, en saber hacerlo y en tener la persistencia y la determinación de lograrlo" (B. Bailey)


"Si puedes soñarlo, puedes hacerlo" (Walt Disney)


"Si piensas que puedes, tienes razón y si piensas que no puedes, también tienes razón."


"El futuro pertenece a quienes creen en la belleza de sus sueños" (Eleanor Roosvelt)


"El mayor peligro para la mayoría de nosotros no es que apuntemos demasiado alto y no demos en el blanco, sino que apuntemos demasiado bajo y acertemos" (Miguel Ángel)


"No podemos descubrir nuevos océanos a menos que tengamos el coraje suficiente para perder de vista la costa" (Anónimo)


"Los muros existen por alguna razón. Y no es para mantenernos fuera, sino para darnos la oportunidad de demostrar hasta qué punto queremos algo. Y para frenar a quienes no lo desean suficientemente." (Randy Pausch)

¿Alguien me lee?

Quiénes vienen por aquí