¡Estoy feliz! :) Las noticias vuelan y a estas horas ya no es nuevo para nadie que hoy, por fin, ha salido la nueva convocatoria de la oposición, confirmando todos los rumores que veníamos oyendo últimamente. Y es verdad: los rumores eran de fiar, pero hasta que no está en el B.O.E., no son más que eso: rumores. Y podía haber ocurrido que sólo se confirmase alguno de los cambios previstos. O, incluso, que en el último momento, las cosas no fuesen adelante o se pospusieran a la convocatoria siguiente, o vaya usted a saber. Pero no: se han confirmado ¡todos!
Por un lado, ha habido una reducción de temario muy importante: han suprimido bastantes temas tanto del segundo como del tercer oral. No he sacado el cálculo exacto pero son más de 30 temas menos en total.
Por otro lado, los exámenes orales ya no son de 75, sino de 60 minutos. Eso, en principio, se traduce en que los temas ya no son de 15, sino de 12 minutos. Y, sí, eso puede resultar muy incómodo a la hora de adaptar el estudio de temas que ya tenemos machacados y estudiados de una forma concreta. Pero, al mismo tiempo, no deja de ser una ventaja porque supone en sí una reducción importante. Beneficia más a los nuevos, pero en realidad es bueno para todos, creo yo. ¡¡Mucho peor sería que en vez de en temas de 12 minutos los hubieran convertido en temas de 18!! Porque, a fin de cuentas, lo importante no es tanto el número de temas como la duración de cada uno de ellos: no es lo mismo estudiarse 400 temas de 10 minutos que 400 temas de 20 minutos. Y al quitarnos 3 minutos de cada tema nos quitan 1200 minutos. Es decir, es como si nos quitasen nada más y nada menos que ¡¡80 temas de 15 minutos!!
A lo anterior hay que añadir que en el examen, una vez sacadas las cinco bolitas, podremos descartar una y cambiarla por otro tema de los del mismo bloque. Eso puede tener ventajas e inconvenientes, según cómo se tome el tribunal la decisión de cambiar un tema por parte del opositor. Sin embargo, centrémonos en las ventajas: por una parte, cuando haya un tema de esos que nos hacen levantarnos de la silla, uno de esos temas que no hemos repasado desde la edad de piedra... podremos cambiarlo por otro. Por que sí, es verdad que nunca hay que ir con ningún tema en blanco, que lo ideal es llevar todos los temas al 100% pero, en la práctica no es tan fácil. Pero, si seguimos poniéndonos en el mejor de los casos, pensemos que llevamos de PM todos los temas de todas las materias y, después de sacar las bolas, nos encontramos con que todos los temas que nos han salido son temas de esos "insulsos", aburridos, doctrinales y que no nos dan la oportunidad de demostrar al tribunal lo muchísimo que sabemos y el dominio que tenemos del derecho positivo. O que nos toca un tema que casi no tiene artículos como, por ejemplo, el tema de los delitos contra el honor, pero nosotros dominamos tantísimo el Código Penal que decimos: "no, yo renuncio a este tema, a ver si hay suerte y me sale uno más interesante, como los delitos contra la propiedad intelectual o el genocidio..." (A mí no me ha pasado nunca, pero vamos, todo es posible, ¿no?) :D
A eso se une el hecho de que la reserva del segundo ejercicio ya no la tendrán sólo los que hayan sacado una nota superior a la media, sino también aquellos que hayan sacado una nota hasta un punto por debajo de la media. No guardan sin más el segundo oral a todos los que lo aprueben... pero sí a muchos de los que lo aprueben, lo cual humaniza mucho la oposición. Porque, no nos engañemos: nosotros ya estamos acostumbrados, pero no es normal tener que presentarse una y otra vez y repetir año tras año un examen que has aprobado ya en otras ocasiones, sólo porque suspendes el siguiente. En serio: nosotros porque lo tenemos más que asumido pero normal, lo que se dice normal, no es.
Igual que lo de los llamamientos: ahora, aunque no sabremos con antelación el día exacto del examen, sí sabremos en qué semana nos va a tocar. ¡¡Por finnnnn un poco de sensatez!! Porque, desde luego, si los no opositores no entienden que tengamos que repetir una y otra vez exámenes que ya hemos aprobado, menos aún que no sepamos cuándo nos vamos a examinar. Es una barbaridad. Y, por fin, han entrado en razón ¡¡Mola!!
En fin, no sé si me dejo cosas, pero el hecho es que estoy contenta. Por fin hay buenas noticias. Sí, son mejorables... y con lo chapucera que es esta gente, a saber cómo funciona todo en la práctica (no he hablado del tema de los cinco minutos de gracia, que ya veremos cómo los gestionan), pero el hecho es que todas las reformas apuntan a una misma dirección: parece que quieren cubrir las 400 plazas a toda costa. Y eso, aunque no lo hagan pensando en el bien del opositor, sino porque les interesa cubrirlas, el hecho es que a nosotros nos beneficia. Ésa es la mejor noticia.
Como decía mi compañera Mery en su blog, creo que esto es lo que necesitaba para recuperar el ánimo.
¡¡Muchísima fuerza a todos, chicos!!
A todos los veteranos: sé que los más beneficiados son los que están empezando ahora, pero esto, en definitiva, nos beneficia a todos. Mery: que éste es tu año, que sí, ¡¡¡ya lo verás!!! :) :)
Y a los que estáis empezando, os digo lo mismo: ¡¡Mucha fuerza!! Que es una buena oportunidad, que están dando facilidades. Y hacía mucho que no las daban. ¡¡Así que a por ellos!!
¡Besos a todos y feliz convocatoria!